GESTIÓN DE RESIDUOS (PLANTA DE RECICLAJE)

En los países industrializados, la preocupación por el medio ambiente, está implicando un espacio importante en sus agendas de trabajo, y un porcentaje cada vez mayor dentro de sus presupuestos. La creación de convenios, tratados y acuerdos internacionales que persiguen la conservación del medio ambiente, han resultado ser el origen de normativas más focalizadas. La idea general, es establecer patrones para una economía global sostenible. En este sentido, dentro de la Unión Europea, se han creado leyes con el propósito de prevenir y disminuir el impacto de los residuos en el medio ambiente. En España, una de las primeras leyes es la Ley 11/1997 de 24 de Abril.

Lo importante es hacer resaltar, que las empresas han disfrutado durante mucho tiempo, de un coste muy bajo por el uso de los bienes de la naturaleza, al igual que no han repercutido en sus costes de producción, el generado por desprenderse de sus residuos, y la consecuente afectación al medio ambiente.

En la gestión empresarial moderna, y dentro de su Responsabilidad Social Corporativa (RSC), la industria está otorgando gran preponderancia a la puesta en valor de sus desechos (valorización), o su eliminación de forma segura. En España, la ley de residuos 22/2011 de 29 de Julio, busca la prevención de la generación de residuos y la preparación para la reutilización y reciclado.

GRANIOREGA S. L, como gestor de residuos, aboga por el cumplimiento de la normativa vigente en temas ambientales, además que pone a disposición de los productores, poseedores y agentes de residuos, su PLANTA DE RECICLAJE ubicada en Leiro, en la provincia de Ourense. Esta planta está destinada para el reciclaje de plásticos, madera, hierro y todo tipo de material de construcción. Cuenta en su inventario de maquinaria, de una machacadora para la obtención de zahorra, proveniente de los RCDs que recibe dicha planta.

Por tanto, GRANIOREGA S.L. posee la planta de reciclaje que le permite gestionar los residuos que puedan disponer sus clientes, y de igual manera, los que se originan en sus propios trabajos de derribo y demolición.